Déjame contarte una historia...
Tengo más de 22 años de dedicarme a apoyar a otras personas a cambiar sus vidas de una forma integral.
Miles de clientes han confiado en el Coach Miguel Bran para sus procesos de transformación, gracias a Dios, literalmente miles han conseguido cambios significativos en su salud y bienestar.
¿Has escuchado el dicho: "En casa de herrero, cuchillo de palo"?
Por si no lo conoces, el mismo se refiere a que, aunque se posean las herramientas para lograr algo o apoyar a otros, puede que no estén siendo aplicadas en nosotros mismos. En otras palabras, falta de congruencia y quizás de integridad con nuestra identidad.
Pues resulta que en el mes de octubre de 2019, hice un viaje de vacaciones con mis hijos. Habíamos estado esperándolo hacía ya algún tiempo y estábamos dispuestos a aprovechar todo lo que ir a ese viaje incluía, bueno, al menos eso quería yo.
Eso incluía, todo tipo de comidas y bebidas, lo cual no está nada mal, mientras se retomen todos nuestros hábitos al regresar.
Pero venían las fechas de fiestas, reuniones, convivios, más comida y más bebida, por lo que decidí, oh error, empezar de nuevo en enero. Sí, sé que muchos lo hacemos siempre a fin de año, pero, en mi caso, no me había pasado.
Empezando el 2020, obviamente le entré con todo a querer recobrar lo que había perdido y perder toooodo lo que había ganado en peso, aún no era algo significativo pero sí algo a lo que debía poner atención.
En eso, PANDEMIA, y como todos creímos ingenuamente al principio, esta no duraría más de 15 días a un mes.
Cuando esto sucedió, pues empezamos a estar menos activos, a pedir deliciosas comidas de todas las emprendedoras de alimentos y a pedir a domicilio para "apoyar a los restaurantes". Ah, y no podía faltar el vinito que ahora ya no era limitado a ocasiones especiales y fines de semana, sino que, como estábamos prácticamente encerrados y de vacaciones forzosas, lo tomábamos ya con más frecuencia.
Por si esto fuera poco, la incertidumbre, miedo y estrés que generaba, y sigue causando este acontecimiento, debía ser liberado, siendo las formas más utilizadas, sí adivinaste, la comida, tirarnos a ver maratones de Netflix y los traguitos.
¡Bienvenidos a la nueva normalidad de hábitos de encierro!
Para no alargar más esta historia, ya que prometí que estas lecciones serían cortas, a principios de junio 2020, tenía ya un sobrepeso exagerado debido a la consistencia, en este caso, a la consistencia de malos hábitos.
Decidí hacer algo inmediatamente y fue crear el programa de entrenos en línea NOW para apoyar a otras personas y a mí mismo, a contrarrestar todos estos efectos.
Pero me faltó algo, únicamente empecé con el ejercicio y muchas cosas siguieron igual, es decir, los demás hábitos que no me ayudaban.
Cansado al final de estar haciendo ejercicio sin resultados, decidí empezar con otro programa, Smart Life, con el cual, logré al fin la consistencia en el resto de buenos hábitos a los cuales necesitaba regresar.
Sí, pude haberme dado por vencido por la falta de resultados y, como una "llamarada de tusa", brillar por un rato y dejar todo tirado en un par de meses.
Al final, si no veía resultados rápidos, por lo menos lo intenté ¿no?
Sin embargo, ¿a dónde me hubiera llevado esto? y más aún ¿cómo estaría ahorita?
Únicamente porque fui persistente, consistente y nunca tiré la toalla, logré nuevamente tener resultados.
De repente, gracias a Dios, empezaron a verse y sé que no fue por arte de magia. Más bien, por seguir cada día, a pesar de caer, a pesar de retroceder y seguir adelante, que los mismos vinieron al fin.
Solo para darte una idea, mira esta comparación:
Te digo verdaderamente que esto no fue fácil, ni vino de la noche a la mañana.
Es el resultado de mucho enfoque, consistencia y perseverancia. El ir re-instalando los hábitos saludables poco a poco pero sin tregua.
Un proceso a lo largo del tiempo que, aunque se sienta lento, es muy gratificante y sostenible. Tan sólido que no se derrumbará fácilmente.
16 meses llenos de satisfacción y seguimos!
Desde que hice esta composición, el 1 de octubre 2021, he logrado avanzar un poco más hacia mi meta y sé que muy pronto estaré en ella.
No te conté todo esto para promocionar ningún programa ni para presumirte.
Lo estás viendo porque espero que te sirva de mucha inspiración para arrancar de nuevo o, si estás en un proceso, cualquiera que sea, para motivarte a que no te detengas nunca, aunque caigas, aunque retrocedas, aunque haya días duros, sigue adelante.
Coach
Miguel Bran
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